Aguacoatl nace como iniciativa de negocio creativo y con los años ha tomado nuevas formas y experimentado transformaciones en cuanto a nombre, logos, colecciones de prendas e imágenes.
Ha muerto un par de veces y ha renacido de sus cenizas.
El propósito en cambio se ha modificado poco, sigue siendo la pasión que crece al plasmar un legado ancestral de improntas simbólicas como coordenadas de comunicación entre pueblos a lo interno de territorios de forma regional en el continente por cientos y miles de años. Interactuar con el poder psíquico de la imagen ancestral revive el hecho de que los símbolos sean atemporales y persistan más allá de contextos propios del paso de la historia.
El diseño de prendas de vestir también ha preservado con los años la comodidad, la calidad y la belleza como valores fundamentales.
Laura es quien crea y se recrea en Aguacoatl, pero es posible sólo gracias a la red de la familia, hermanas, amigas y distintas colaboraciones que acompañan y apoyan al emprendimiento.